Sí, ya se que estamos a finales de enero, pero con lo del Cambio Climático (ya hablaré de esto en otro momento, o mi padre se pone tenso), las navidades blancas han llegado en esta fecha, así que habrá que replantearse el cambio de fechas.... Bueno, como decía, aunque sea con retraso, os haré un breve resumen de como han ido las navidades.

Para comenzar, mis padres decidieron volverse a Huelva, así que nada, mudanzas y más mudanzas. menos mal que estuve ojo avizor y con el grito a ras de boca, porque temí que me metieran en una caja... En Huelva me han habilitado un cuarto para mí sola, lo cual no está mal. He incluso una zona de juegos para mi seta.

Pero cuando empezaba a acostumbrarme, ¡hala! a madrid de nuevo, aunque ahora como visitantes (por eso estaban tan contentos). De todas formas, ya arrancó papá con su espíritu navideño, y aunque poco, algo de decoración puso. Tendré que definirme sobre esto, porque papá está exultante y adora la Navidad (vamos, hasta el punto de utilizar mi imagen para felicitar a sus amigos y clientes, sin contar conmigo ni pagar royalties....), mientras a mamá parece no gustarle y, ahora, a toro pasado, veo que el espíritu le aparece cuando tiene que quitar los adornos, vamos que es el espíritu de la anti-navidad. No sé que hacer, pero se que están espectantes ante mi decisión....

El día de Navidad lo pasé con los tíos Elena y Alejandro, y los primos Arancha y Jaime. Todo el mundo estaba hablando de Papa Noél, que si qué te ha traído, que si mira qué cosa, que si mira que otra, que si mira como regalo lo que me regalaron a mí... en fin cosas de mayores. ¡A mí me la van a dar!, ¿Pero alguien en su sano juicio puede creerse que un señor gordo de finlandia, en un carro tirado por renos, con el calor de España, puede venir a repartir regalos por todas las casas con el precio al que está la zona verde en Madrid?. ¡Pero bueno!, y encima ¡Vestido de rojo!, como la coca

cola.... Otra cosa son los Reyes Magos, que, como todo el mundo sabe, existen. Vamos, sólo hay que verlos en la cabalgata.... En todo caso, el supuesto Papa Noel decidió traerme un casco para cuando voy con papá en bici.... ¡como si no se notara su mano....! (¿se nota queno me gusta?
El día 28, el mío, digan lo que digan (por si alguien no lo coge, es el día de los inocentes), fuimos a celebrar el cumple de la abuela a un restaurante árabe. ¡Que os voy a contar!, en mi línea: camareros sonriéndome, dando la grande cuando alguien además de mí comía, saludos a los vecinos de las mesas, etc... Luego aprovechamos para cuntivar mi afición musical y anduvimos por la calle, contactando con músicos. Mis padres dicen que me gusta la música y el baile (es evidente, tampoco hace falta mucho estudio para ello), pero mientras mamá dice que bailaré flamenco, papá dice que tocaré el violín. Yo, que soy la que sabe de qué va a ir el tema, tengo claro que quiero ser percusionista... ¡ y no les queda na!. En cualquier caso, fijaros que modosita paseando con papá por la calle Serrano, tan calladita en el restaurante, e incluso en algún momento dormida....


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