Efectivamente, ante la ebullición de exposiciones impresionistas en Madrid (y que me temo me llevarán a ver estas Navidades), una artista como yo no podía dejar de hacer su aportación. Estuve pensando si dedicarme al puntillismo como Seurat, a la pincelada larga como Van Gogh, o a las superficies abocetadas como Cezanne; también pensé si dedicarme a retratar personas como Renoir, naturalezas como Monet, o interiores urbanos como Degas... Tras muchas vueltas, decidí ser yo misma, y aprovechando las enseñanzas de mis papás que me llevaron a Rouan y al Museo de Orsay el año pasado, decidí hacer una serie, aprovechando los efectos del cambio de luz a lo largo del día... Sí, se que suena pedante, pero una es así...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario